La normativa sobre control del ruido en el trabajo de 2005 reconoce la música como un ruido deliberado creado para el entretenimiento.
El ruido del espectáculo, la industria musical y la ley
Desde abril de 2008, el sector del ocio está sujeto a la normativa sobre control del ruido en el trabajo (2005). Esta normativa reconoce la música como un ruido deliberado creado con fines de entretenimiento. Como tal, se requieren directrices sólidas y prácticas de exposición al ruido para garantizar la seguridad de las personas en las inmediaciones.
Ofrecer los medios de protección adecuados a los trabajadores, empresarios y artistas del sector de la música y el espectáculo no sólo les ayudará a conservar su capacidad auditiva, sino también sus carreras. Por lo tanto, los propietarios y operadores de locales tienen la obligación legal de no exponer a sus trabajadores a niveles de ruido excesivos y potencialmente perjudiciales.
La normativa sobre ruido abarca diversos sectores de la música y el ocio en los que se toca o graba música en directo, como pubs, discotecas y otros locales como salas de conciertos. Entre los empleados de estos entornos que están cubiertos figuran el personal de barra y de pista, como los recogedores de vasos, los músicos, el personal de seguridad y los trabajadores autónomos. El público, sin embargo, no entra en el ámbito de aplicación de la misma legislación.
Responsabilidad de la industria del espectáculo en el control del ruido en el trabajo
Corresponde al operador del local designar a un miembro cualificado de su personal para garantizar que cumple la normativa necesaria en todo momento. El factor más importante que deberán tener en cuenta no es simplemente el nivel de ruido, sino la cantidad de tiempo que los empleados' están sometidos a ella en su entorno laboral.
El ruido se mide en decibelios, abreviados dB, con un filtro de frecuencia ponderada "A" aplicado por el instrumento de medición del sonido para reproducir la respuesta del oído humano.
A la hora de controlar el ruido en un entorno de trabajo, el primer paso es eliminar el peligro. Si esto no es posible, hay que intentar reducir el volumen o el nivel de ruido antes de intentar separar a los empleados de él o limitar el número de empleados sometidos a él. También puede utilizarse como medida preventiva la reducción del tiempo que los empleados están sometidos al ruido fuerte, así como la introducción de protección auditiva en forma de tapones o protectores auditivos.
Otras medidas que pueden tomarse para limitar la exposición al ruido en un local de ocio incluyen el uso de limitadores electrónicos en los equipos. La orientación de los altavoces también puede marcar una gran diferencia; por ejemplo, unos altavoces montados en el techo con un volumen más bajo pueden ayudar a dirigir el ruido hacia la pista de baile y alejarlo de los demás.
Además, es importante mejorar la calidad del sonido generado para que no distorsione y también educar a los empleados para que puedan ayudar a evitar que el ruido alcance niveles excesivos. El apantallamiento, el uso de sistemas de aviso visual y el aislamiento pueden encontrarse en los locales de ocio para proteger la audición de los trabajadores y evitar la pérdida de audición.
Más información entretenimiento ruido supervisión,
Este artículo está escrito en apoyo de la Semana de Acción contra el Ruido 2013 - para más información sobre esta iniciativa, consulte el sitio web aquí.